Creemos que la creatividad es una acción fundamental para la creación de un futuro comunitario ¡y el PAN era el mejor punto de partida!" Considerada una de las 5 mejores panaderías de Santiago según diversos medios de comunicación, Pan Mostacho es una panadería posmoderna, artesanal, de pan de masa madre con un sello especial que es dado por sus dueños Pierre Sauré y Álvaro Saavedra, que nació para “Recuperar una forma de cocinar en donde el ingrediente principal fuera “el tiempo“, así podíamos compartir la cultura de alimentarse bien”. Han participado en múltiples festivales gastronómicos y ferias de emprendimientos mostrando sus productos y haciendo clases masivas, han abierto 3 sucursales y este 2022 cumplen 6 años. Destacan distintas hogazas de harina de trigo, integrales y centeno, ciabattas blancas y albahaca-ajo, baguette, molde nuez, sándwiches, focaccia chilena, su propia línea de Café de grano, una línea de carnes ahumadas para acompañar sus panes, y bollería como croissants, medialunas rellenas con manjar, danesas, babka, galletón relleno con queso crema y más. Tienen distintas líneas de harinas y preparaciones dulces. La masa madre es un cultivo de levaduras y bacterias lácticas (responsables de fermentaciones en múltiples alimentos) que enriquecen el pan y que conservan tu flora intestinal y te llenan de nutrientes. Para el pan, la masa madre es la base de la producción. Con ella el pan fermenta y se vuelve nutritivo. El pan de larga fermentación tiene un proceso artesanal prolongado y minucioso. Comienza con el amasado y el reposo de la masa en temperaturas controladas desde 6 hasta 48 horas. Un 30% o 40% del contenido de la receta es abordado por la masa madre como ingrediente principal y cada tipo de receta conserva diversos ingredientes, procesos e hidrataciones, usando diferentes técnicas manuales de formado, greñado y horneado para producir distintos tipos de panes de un día para otro, varias veces al día. Un pan de masa madre tiene una duración prolongada si se conserva su humedad en un lugar seco, para evitar la aparición de moho. La temperatura ambiente es la clave para dejar que el pan no pierda su calidad. Debemos pensar que el pan está vivo y necesita respirar. El refrigerador a veces aumenta la humedad a tal punto que los hongos florecen con mayor facilidad. Taparlo con un paño, guardarlo en un cajón o simplemente dejarlo en una bolsa puede hacer que consumas el pan gradualmente sin perderlo. Rebanarlo y congelarlo, o congelarlo entero también es una buena opción si no puedes recurrir a la panadería con regularidad. Los principales ingredientes de nuestro pan son harina, agua y sal. No añadimos materias grasas (de origen animal) para saborizar nuestros panes, exceptuando los panes (bollería) que requieren de huevos o mantequilla pues son recetas enriquecidas, o los panes de queso y las galletas de mantequilla. Tenemos una línea vegana. ¡Atrévete!